08 febrero 2007

El amor


El amor es la fuerza más poderosa del universo. Si reflexionamos sobre las cualidades que más admiramos en otras personas, la más importante sería la capacidad para expresar amor a los demás. El amor es la enseñanza fundamental de todas las religiones. Los Profetas de Dios nos informaron acerca de las diferentes clases de amor y de su importancia.El amor puede mantener a pueblos y naciones enteras en armonía, une familias y tiene el poder para unir el mundo.

Acerca del amor se han escrito multitud de canciones, poesías, obras de teatro y novelas. Las cualidades del amor, tales como la amabilidad, la paciencia, la atención, el recuerdo, la ternura, la pureza de intención, el desinterés, la compasión, la cortesía, la consideración, la asistencia y el servicio, se ponen de manifiesto cuando se comparan con las cualidades opuestas del ego y del egoísmo humano. Las sagradas escrituras de las religiones ofrecen guía e inspiración para ayudarnos a desarrollar estos atributos de amor en nosotros mismos.Y quizás ésta sea una de las cosas más importantes que podemos aprender durante nuestra vida, pues al ir creciendo espiritualmente reflejamos los atributos del amor en los demás.

Estamos familiarizados con muchas leyes físicas que operan en el universo,y, conforme estudiamos y nos desarrollamos, nos vamos haciendo cada vez más conscientes de las leyes espirituales que también existen en el universo. En los versos sagrados de las religiones se afirma que el amor es la ley suprema del universo, lo cual nos demuestra lo importante que es el amor en el plan de toda la creación.

Deberíamos esforzarnos por hacer del amor el principio dominante en nuestras vidas. Las mismas vidas de los Profetas nos muestran las clases de amor que más admiramos. Estudiando la historia de sus vidas y sus enseñanzas, entendemos la importancia del desarrollo de las cualidades del amor en nuestras vidas.

Los textos sagrados de las religiones nos invitan a extender nuestro concepto del amor más allá del amor a nuestros seres queridos, a toda la humanidad, sin importarnos sus diferencias culturales o su apariencia física. Un mundo unido debe construirse sobre la base del amor; y esta base puede construirse enlazando, una a una, a todas las personas del mundo con los hilos dorados del amor.

David Jurney- Gemas de Guía

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