24 julio 2009

Pensamientos para un día dichoso


Foto: Joana Maria - Bahía de Pollensa

DICHA SUPREMA

La dicha suprema, es la felicidad que va más allá de los sentidos, más allá de la risa y el regocijo; está lejos del dominio de los placeres experimentados. No es perderse en la atracción suave de los vientos, ni usar los ojos para poder ver lo que te alivia y lo que alegra. No es usar los oídos para ser hipnotizados por la magnificencia de la música, ni usar la boca para experimentar la dulzura del primer fruto de la estación.

La dicha, consiste más bien, en estar en soledad con uno mismo tranquilamente...sereno...con los pensamientos dirigidos hacia el ser, escuchando el sonido del silencio. Es entonces que los pensamientos se dirigen más allá del plano físico, en armonía con lo espiritual, con lo puro, con lo pacífico. Pocos pensamientos...la unión con el Padre, el que está lleno de dicha suprema; experimentando su Paz...siendo la personificación de esa paz; experimentando su amor...siendo la personificación de ese amor; experimentando la dicha...siendo la personificación completa de ella.

Pensamientos para un día dichoso

Dar felicidad a los demás es un gran acto de caridad.

La alegría eleva el espíritu de quien la posee, y trae con ella una sonrisa en los labios de los demás.

Una sonrisa hace que el esfuerzo sea fácil ante cualquier dificultad.

Dedica mucho tiempo a la mejora de ti mismo, así no habrá tiempo para criticar a los demás.

Para probar la dulzura de la vida debes tener el poder de olvidar el pasado.

Aquellos que se mantienen felices nunca tendrán pereza interna. La pereza es un gran vicio.

El equilibrio es la verdadera fundación para una vida de dicha, Mantén esto en tu mente y tu presente y futuro serán siempre brillantes.

Cuando sonríes no solamente te sientes felíz, sino que irradias un rayo de luz a la vida de los demás.

Tener equilibrio en todas las situaciones es la llave para la felicidad.

El que sabe como adaptarse es el que sabe como sobrevivir.

Recuerda que eres muy especial. Nadie puede desempeñar tu papel mejor que tú mismo.

Envejecer no importa, pero tomarte la cosas demasiado en serio te hará envejecer.

Cuanto más te comprendas a ti mismo, más fácil se te hará el permanecer felíz y pacífico.

Pensamientos para cada día - Universidad Espiritual Mundial Brahma Kumaris